Frèderic Gros es un filósofo francés, profesor de la Universidad París XII y en el Institut d’Ètudes Politiques, pero más conocido por haber editado las últimas lecciones de Michel Foucault realizadas en el Collège de France. “Desobedecer” es su segundo libro publicado en español en 2018, siendo posterior a “Andar, una filosofía” publicada en español el 2014. El libro parte con la provocadora frase atribuida a Wilhem Reich en la que señala que no hay que cuestionarnos por qué rebelarnos, sino que por qué no rebelarnos. Con esta provocativa pregunta el autor hace un barrido filosófico de cómo ha sido abordada la idea de la desobediencia, así como su relación con conceptos como la rebelión, transgresión, obediencia, resistencia, sobre-obediencia, o desobediencia civil y cívica.
Este libro permite una aproximación histórico-filosófica del concepto, pero también las formas en que se puede desobedecer, ya que precisamente ese es el verdadero problema. En este sentido, permite introducir al lector en textos tan antiguos como el desconocido (pero fundamental) Discurso de la servidumbre voluntaria escrito en pleno renacimiento por un joven filósofo llamado Étienne de la Boétie (¡escrito a sus 18 años!), el debate en los años 60 ́s acerca del Caso Eichmann descrito por la filósofa Hannah Arendt, y abordando la desobediencia civil de Henry David Thoreau. Asimismo, para enriquecer el debate entrega análisis de obras literarias como el fragmento de la aparición de Cristo en Los hermanos Karamazov, o Antígona de Sófocles.
A través del modo de escritura de Gros, logra mantener al lector dudando o cuestionando la desobediencia misma, llevando el concepto a los límites, donde finalmente nos lleva como lectores a instalar al concepto de desobediencia como una pregunta personal. De esta manera, el libro logra a mi juicio (exitosamente) hacer una reflexión profunda sobre un concepto que es muy utilizado a la ligera en el lenguaje convencional tanto por quienes buscan ejercerla como por quienes se oponen tajantemente a ella. Aunque a mi juicio, el libro puede ser de gran utilidad para todas aquellas mentes que quieren desobedecer, pero no saben cómo. En este libro podrán encontrar varias preguntas para pensar cómo hacerlo.
Si se pudieran identificar algunas críticas al texto, serían dos. En primer lugar, que no es de lectura accesible para todo público, tanto por los temas abordados, como también a las obras a las que hace referencia, que, de no conocerlas de antemano pueden dificultar la lectura como es el caso de algunas ideas de Kant (¿Qué es la ilustración?) Platón (La República) o el propio Henry David Thoreau (La desobediencia civil). Por otro lado, otra problemática por curiosa que parezca es que no entrega respuestas claras, sino que más preguntas, que permiten seguir pensando y adentrarse en esta problemática.